Este apellido, si eres un Martínez de buena y auténtica ley, sabrás que es patronímico derivado del nombre propio Martín. Su origen, opinan los eruditos en solares y genealogías, se encuentra en la antigua y generalizada costumbre de convertir en apellido el nombre de pila del padre u otro antecesor y aplicarlo a los hijos o descendientes. En este caso se ha derivado del que fuera en otro tiempo muy popular nombre de Martín y significa sencillamente "hijo de Martín". La terminación de "es" o "ez" en español quiere decir "hijo de" indicando el origen patronímico del apellido. El nombre Martín, fue muy frecuente y abundante por España, y parece igualmente que proviene del nombre latino martínus, gentilicio derivado de Mars, Martis, en español Marte: Dios romano de la guerra, y también: "hombre marcial, belicoso, guerrero". Lo que atribuyéndose a un español, habitualmente bajito, con malas pulgas e históricamente dispuesto a entrar en alguna guerra o disputa con vecino o forastero, parece que no es una tesis descabellada.
La Puerta de Toledo, actual Plaza de Andalucía de Ubeda |
Hasta aquí, hemos expuesto la doctrina genuina y ortodoxa sobre la naturaleza del apellido. Sin embargo, siguiendo a Darwin podemos observar como en la propia esencia del apellido existe un elemento común que lo ha hecho nacer para dominar junto con los García y Sánchez, el futuro de la sociedad. Y es que si entre los apellidos, al igual que en la evolución de las especies, se encuentra un principio, en virtud del cual sólo las mejor dotadas sobreviven. No podemos negar que los Martínez están especialmente dotados. Esta tesis, puramente científica se encuentra acreditada empíricamente. Y si no a mi ejemplo me remito. Dentro de veinte años en mi calle sólo existirán musulmanes y Martínez, eso si acompañado de algún que otro hispano solitario que en su día fue hijo único de alguna familia acompasada a los modernos tiempos.
En prueba de esta tesis, decir que en toda España hay unas 224.000 familias apellidadas Martínez, en Europa hay unas 300.000 familias con el apellido y en América encontramos a más de 500.000 familias que tienen el apellido. En total en el mundo hay aproximadamente un millón de familias que tienen el apellido.
En Andalucía, encontramos casas radicadas en Serón y Vélez-Rubio (provincia de Almería); Jerez de la Frontera y Puerto de Santa María (Cádiz); la radicada en Dólar (provincia de Granada); y la existente en Úbeda, que es de la que provenimos el que escribe y sus hermanos y primos de Almería.
Los colores, los animales, las bandas… Todos estos elementos tienen un significado en heráldica, sobre los que no nos vamos a detener. Sin embargo, no puedo resistirme a la explicación que daba mi abuelo Diego a los distintos elementos del escudo. En especial cuando entraba en el porqué de la zorra que no lobo (En este punto decir que al “Martínez” que hizo su descripción y que hemos trascrito literalmente, lo de la raposa no le debió cuadrar con el noble linaje, por lo que mudó zorra por lobo, quizás por parecerle animal mas fiero y solitario, y por tanto mas acorde con el ideal de tan caballeruda estirpe).
Las "Torres negras" de Torreperogil |
Esta inclusión en las armas familiares, no es contraria a las costumbres propias de las familias hidalgas. Piense Vd, que cualquier marqués, duque o simple conde le relatará no sin orgullo, que la tatarabuela de su abuelo paterno anduvo de amoríos con tal o cual testa coronada. Pero este extraño orgullo, no le impedirá darse por ofendido, si alguien se atreve a recordarle que esa misma abuela era ligera de los mismos cascos con que coronó a su difunto abuelo, si la persona coronante carecía de derecho a entierro en El Escorial.
Pero en fin, dejando el tema de las Damas del alquiler, y las contradicciones intelectuales de la aristocracia. Lo cierto es que la explicación de mi abuelo, me parece mucho más atractiva que la tradicional de arcano o símbolo de la preponderancia de la inteligencia y la astucia sobre la fuerza bruta, que es francamente más Esópica y aburrida.
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